Por Indrabati Lahiri, es.euronews.com – Estos aviones están equipados con centros de mando móviles, zonas de operaciones, salas de conferencias y mucho más, y además pueden resistir pulsos electromagnéticos. Transportarían al Presidente de Estados Unidos y a los altos mandos militares en caso de emergencia nacional.
El gigante aeroespacial y automovilístico Rolls Royce ha revelado recientemente que ha conseguido un contrato para suministrar tecnología a la versión de la última generación del avión resistente a explosiones nucleares de las Fuerzas Aéreas estadounidenses.
Esta aeronave será la nueva versión de los aviones E-4B, apodados el “avión del juicio final”, por su capacidad para resistir pulsos electromagnéticos y explosiones nucleares. Formará parte del proyecto Survivable Airborne Operations Centre, en el que trabajan varias empresas aeroespaciales, encabezadas por Sierra Nevada Corporation que ha mostrado su satisfacción en redes sociales.
En tiempos de crisis, los aviones E-4B pueden resultar inestimables para los que se hayan podido refugiar en ellos, ya que son capaces de albergar un centro de mando móvil, para tomar el relevo sin problemas de las instalaciones terrestres destruidas. También pueden repostar en el aire.
Durante su presidencia Donald Trump canceló la fabricación de un nuevo modelo del Air Force One por sus costes desmesurados.
Siempre hay uno listo para Joe Biden en un aeropuerto
Los aviones, con capacidad para unas 111 personas, se utilizarían para transportar a miembros clave del gobierno, como el Presidente de Estados Unidos, los jefes militares conjuntos y el secretario de Defensa. El centro de mando móvil a bordo permite al avión comunicarse con cualquier base militar estadounidense del mundo.
Además de estas instalaciones, el avión cuenta con sala de conferencias, zona de trabajo de mando, espacio para un equipo de operaciones, sala de reuniones, salas de descanso y espacios de comunicaciones.
En la actualidad hay cuatro de estos aviones operativos. Debido a su importancia en situaciones de emergencia, siempre hay al menos uno en espera en una base militar estadounidense específica en todo el mundo.
Todo listo para 2036
El proyecto SAOC, cuya finalización está prevista para 2036, implicará obras en distintos emplazamientos estadounidenses de Ohio, Colorado y Nevada.
El proyecto se lleva a cabo porque la flota de aviones E-4B, cada vez más anticuada, es más difícil de mantener cuando pasa el tiempo y las piezas son cada vez más difíciles de encontrar.
Adam Riddle, alto ejecutivo de Rolls Royce, declaró en un comunicado de prensa: “Durante décadas, Rolls-Royce ha impulsado las operaciones militares en todo el mundo con tecnologías fiables y de vanguardia, transportando con seguridad a los miembros de las fuerzas armadas en sus misiones. Ahora estamos orgullosos de unir nuestro probado pedigrí con la experiencia colectiva de SNC y el resto del equipo de SAOC para garantizar que nuestros líderes militares tengan la plataforma para proteger nuestra seguridad nacional cuando más importa”.
Rolls Royce inició recientemente las pruebas de un mini reactor nuclear en Sheffield, en Yorkshire. Se trata de un acuerdo por valor de más de diecisiete millones de euros con la Universidad de Sheffield.